Como con cualquier mascota, tu amigo gatuno necesita disciplina y normas para convivir dentro del hogar. Sin embargo, a diferencia de los perros, los gatos tienen un carácter independiente y un poco salvaje que hace de esta tarea una misión bastante particular por lo que saber qué hacer y cómo reaccionar para educarlo es fundamental.
La clave de una buena educación es entender su naturaleza y cómo poder ayudarlo a dirigir esas energías salvajes en un comportamiento más acorde a la vida urbana.
Trepadores salvajes
Si quieres evitar que tu gatito ande de trepador y se suba a lugares que no debería como la cama o la cocina. Es muy importante que cada vez que lo veas en esos sitios lo saques de inmediato, sin excepción. La constancia juega un rol fundamental, ya que, si lo dejas estar un día y al siguiente no, no entenderá realmente cual es su posición frente la situación.
Garras destructoras
Otro de los problemas, y el más complejo de todos, es el impulso de rascar. Los gatos necesitan rascar, por ello si quieres que no te destroce los muebles, debes proporcionarle un rascador. Es altamente probable que vuelva al sillón a “estirarse” y mágicamente aparezcan sus uñas para volver a rascar, por lo que es importante que cada vez que lo haga lo tomes y lleves a su rascador. Es un ejercicio que requiere constancia y paciencia, si actúas siempre así, pronto asociará que ese debe ser el lugar donde rascar.
Una excelente manera de incentivar el uso del rascador y eliminar el interés de tu minino al sofá es cubrirlo con una funda. Sus garritas no podrán tocar el tapiz original de tu sillón y su textura le hará perder el interés en afilarlas allí, por lo que no solo es un refuerzo para tus muebles, sino que también para su educación.
Una manera muy efectiva de reforzar ambos entrenamientos es usando una botella de spray, rellenarla de agua y cada vez que se suba o rasque donde no debe, pulverizar agua sobre él, de este modo asociará que el "castigo" lo recibe del agua y no de ti. Entenderá que no debe subirse a esos sitios y rascar los muebles si no quiere recibir un chorro de agua.
Lo más importante es que el proceso de educar a tu gatito debe ser con paciencia, constancia y mucho amor. De esta forma criarás un minino sociable, cariñoso y educado, quién podrá convivir con la familia en armonía.